Que la suerte esté siempre de vuestra parte
En un país que lleva
por nombre Panem, donde hace mucho tiempo se dio una cruenta revuelta por parte
de unos distritos de la periferia que se encontraban avasallados por la
capital; al solucionarse el conflicto se dictó el Acta de Traición, donde se acuerda
que como castigo a esta rebelión, cada circunscripción de los doce sublevados
deberá entregar en “tributo”, a un chico y una chica de entre 12 a
18 años para que participen en los llamados
Juegos del Hambre; allí tiene lugar batalla campal televisada donde
sólo uno puede salir con victorioso, es decir, con vida.
La película presenta
una realidad cruenta donde las masas pobres, empobrecidas y miserables viven
bajo la tiranía de la alta tecnología de una élite adinerada que prospera a espaldas
de una población hambrienta; mientras que la bajeza de los medios de
comunicación se utilizan absurdamente por parte del Gobierno para mantener
intacto su orden social injusto, mostrando el dominio de la élite gobernante
sobre las masas desinformadas y empobrecidas, haciéndolos fácilmente manipulables.
Se muestra en la
película las dos caras de los juegos, el juego en sí donde los jóvenes se matan
entre ellos y la otra, lo que pasa afuera de ellos, donde la gente es
manipulada a su antojo.
Néstor Calderón, cmf
No hay comentarios:
Publicar un comentario