PARA TODOS LOS INSTANTES
Padre Dios, en mis momentos de tristeza sé mi alegría,
en mis momentos de
dolor, mi fuerza y mi calma;
mi claridad en los momentos de duda.
Señor Jesús, en mis momentos de caída
sé la mano que me levante, pero mejor
aún,
no permitas que tropiece.
En mis momentos de cruz, sé tú mi ayudante;
en mis momentos de soledad, sé
tú mi compañía.
Espíritu Santo, en mis momentos de vació, se tú mi efusión.
En mis momentos de batalla, se tú mi victoria.
En mis momentos de hablar, sé tú mi palabra.
En los momentos de silencio, sé tú mi concejero.
A ti Dios uno y trino,
pido en mis momentos de alegría y victoria,
seas mi
humildad, mi regocijo y esperanza.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
quien vive y
reina con el Espíritu Santo,
por los siglos de los siglos. AMEN.
HUMILDAD PARA VOLAR
Dios te pido el don de la nobleza, para
aprender
de los ancianos de mi tierra el buen conocimiento,
del hombre
trabajador el don de la disciplina y la calma.
Señor ayúdame a aprender de la mujer,
la dulzura del buen tratar;
de la madre, el noble amor;
de la abuela, la
alegría del recuerdo.
Señor soy misionero,
dame la gracia de
aprender del amigo, el perdón;
del buen padre el don de acompañar y mejorar.
Pido a los niños la alegría del juego
sencillo;
del poeta, la sensibilidad;
del canto popular, la filosofía y la
oración;
del agricultor, la plegaria del silencio.
Señor ayúdame a valorar al otro como tú
lo valoras,
por eso dame amor al pensar, amor al observar;
amor al hablar y amor al hacer.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
quien vive y
reina con el Espíritu Santo,
por los siglos de los siglos. AMEN
José Pinto, cmf.
No hay comentarios:
Publicar un comentario