La comunidad cristiana de barrio Metropolitano dio la bienvenida a este lunes 4 de diciembre al segundo día de nuestros parrandones navideños. Nos encontramos para reflexionar en el valor de la UNIDAD.
Luego de que María recibiera con sorpresa el encargo
de Dios para ser la madre de Jesús, María salió a visitar a Isabel su prima. Ellas estaban unidas porque eran de la misma
familia y pertenecían al mismo pueblo; juntas podían ayudarse a salir adelante
en cualquier dificultad. La vida es más
bella cuando la compartimos en comunidad y cuando la defendemos juntos. Jesús
vino a compartir su vida en familia, en comunidad, para juntos salir adelante. En tiempos de confusión y desesperanza, Jesús
decidió nacer y vivir entre nosotros. Hoy
la vida se vive mejor si nos organizamos para defender la dignidad humana, si trabajamos
por ser más unidos.
Jesús, el maestro al que amamos, nos recuerda que vino
para que tengamos vida en abundancia. Pero
la realidad nos dice que muchas cosas amenazan la vida y nos desunen: falta de
empleo, no hay futuro para los jóvenes, escasez de comida, contaminación de la
naturaleza, inseguridad, etc. Estamos
llamados a dar vida en abundancia… pero la vida se defiende mejor cuando unidos
trabajamos por ello. eso es lo que esconde
la palabra naVIDAd.
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